escuela de musica

Beneficios de las escuelas de música para niños

Aprender a tocar cualquier tipo de instrumento puede ser un gran apoyo ya que ofrece una gran cantidad de habilidades que nos ayudarán con la concentración, memoria y retención de datos. Por otro lado, también veremos mejorada nuestra salud emocional debido a que la música sirve para liberar estrés, hacer que nos sintamos más felices o a realizar las tareas de una forma mucho más amena.

Estudiar música y aprender a manejar un instrumento musical puede estimular el cerebro incrementando su materia gris, mejorando las conexiones entre distintas áreas del cerebro, y mejorando la memoria verbal razonamiento espacio y habilidades de alfabetización. También existen beneficios relacionados con el estado de ánimo debido a la dopamina que se libera en el cuerpo cuando escuchamos música. 

El estudio de música desde edades tempranas, aportará una gran cantidad de beneficios que te explicaremos más detalladamente a continuación.

Beneficios del estudio de música en edades tempranas

Como se comentó anteriormente, algunos de los beneficios asociados al estudio de música incrementan la capacidad de estudio o aprendizaje. Entre ellos nos podemos encontrar los siguientes:

  • Mejora la creatividad. La música es una de las disciplinas más creativas que existen a día de hoy, y es por tanto, por lo que su estudio puede ayudar a desarrollar la capacidad de crear ideas más originales. Se comienza desarrollando la creatividad en torno al instrumento que se estudia, pero poco a poco esa habilidad se irá incorporando en otros ámbitos. 
  • Ayuda a fortalecer la memoria. A la hora de aprender a tocar, es necesario recordar determinada información como tonos, timbres, acordes, melodías…Ese proceso de memorización ayuda a fortalecer nuestra memoria. Según diferentes estudios, se descubrió que la gente que toca un instrumento llega a lograr un desarrollo multisensorial, es decir, a la hora de memorizar algo, tienen mayor facilidad para hacerlo desde sus distintos sentidos. 
  • Aumenta la disciplina. Aprender a tocar un instrumento no es una tarea sencilla y requiere muchas horas y esfuerzo, por lo tanto, es necesario que vaya unido de deseo y ganas. Para poder conseguir este objetivo es importante tener constancia y autodeterminación.
  • Mejora la coordinación. La sincronización entre manos y pies es algo muy importante cuando se toca un instrumento, por lo que será necesario aprender y obtener la capacidad de poder hacer distintos movimientos con cada mano. Esta destreza te permitirá incrementar tu habilidad motriz y poder usar tu mente para realizar distintas actividades simultáneamente. 
  • Reduce la depresión y ansiedad. Las personas que están en contacto con la música mantienen menores niveles de ansiedad ,ya que según distintos estudios, existe mayor nivel de relajación por parte de aquellas personas que interpretan la música. 
  • Mejora la paciencia. Cuando una persona lleva estudiando música desde que es niño, entiende que para conseguir un objetivo se deben seguir una serie de pasos, que no siempre serán fáciles. Por lo tanto, se entiende que en ocasiones los objetivos no son fáciles pero merecen la pena trabajarlos. 
  • Incrementa la sociabilidad. Generalmente en la música, los instrumentos van ligados y es muy común formar grupos, como orquestas. Gracias a estos grupos se consigue que los niños se comuniquen y creen relaciones mucho más fácilmente. 

En resumen, la educación musical para el desarrollo de los jóvenes ofrece una gran cantidad de consecuencias positivas, tanto para su desarrollo mental como psicológico. Aunque sí que es cierto que es necesario un cierto desarrollo físico y mental para poder comenzar a estudiar música, a partir de los 7 años es un buen momento para que los niños comiencen a desarrollar sus habilidades.

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